Cóctel de gala y cena con el Capitán
ESPECIAL CRUCERO

Uno de los momentos claves de todo Crucero es esa noche en la semana que vamos a conocer al Capitán, Orazio D´aita. Para ello hay que cumplir ciertas normas de etiqueta que para los que viajan con maletas son más fáciles de resolver que para nosotros que estábamos de viaje y con una mochila para dos. Sólo hace falta un poco de ingenio y creatividad.
Para nosotros, la cena con el Capitán en el crucero Costa Classica no empezó en alta mar, ni en el puerto de Trieste o en el Restaurante Tivoli. Al menos no fue así para Edgardo, su cena empezó unas semanas antes en Riga, continuó en Vilnius y se hizo efectiva en el Adriático.
Cuando nos confirmaron nuestra plaza en el crucero ya estábamos a mitad del viaje y llegamos a la conclusión de que Edgardo no contaba con la indumentaria básica adecuada para una de esas noches. Claro que Julia si lo había previsto y además contaba con el 75% de la capacidad del equipaje, por tanto había agregado prendas como un vestido y calzado adecuado. Pero Edgardo sólo tenía un pantalón que podía usar en esta situación. Había que conseguir una camisa, una corbata y un par de zapatos.
Primera compra en el Mercado Central de Riga, el mayor mercado y bazar de Europa. Este sería nuestro lugar. Primera compra una camisa mangas largas blanca a casi 4€. Era la mejor oferta que se consiguió, eso si, la camisa era unas dos tallas mas grande que el que se la iba a poner. Por suerte «il Capitano» no se dió cuenta.
Según Julia, la camisa sola quedaba mal, así que había que ponerse corbata. Esto de ser viajero con corbata no colaba del todo con las ideas de Edgardo, pero «todo sea por que me dejen cenar con el capitán». Ya en Vilnius, durante una lluviosa tarde, de camino a Trakai nos encontramos con una tienda y dimos con una corbata al estilo colegial, pero de todas las que había era la que mas acorde estaba a la situación.
Ahora venía lo mas difícil, los zapatos. Difícil, porque podría ser lo mas caro y lo mas incómodo de trasladar en el resto del viaje. Después de girar y girar se decidió que la mejor opción era comprar unos nuevos, pero preferiblemente que estuvieran en Rebajas. Lo conseguimos. Ya teníamos lo que faltaba para cenar con el capitán.
Durante un Crucero suele haber al menos una Cena con el Capitán y Cóctel de Gala. Para ambas ocasiones en el TODAY (ver Primer Día a Bordo de un Crucero) se hace una breve explicación de la «etiqueta» recomendada a utilizar esa noche.
Antes de ir a brindar visitamos la popa del barco para despedir el atardecer. La imagen lo dice todo, sin palabras ante tan hermosos colores. La tranquilidad del mar y el barco en movimiento, sin duda una de las cosas más lindas de hacer un crucero.
LLegamos al Teatro Colosseo donde Alessandra, la Directora del Crucero, presenta al Capitán y sus oficiales. Entre aplausos el capitán nos saluda y propone el brindis esperado. La tripulación y pasajeros con copas de Champagne en alto brindamos. Luego el Capitán espera a aquellos que quieran tomarse «La Foto» en el corredor de la biblioteca.
Quedamos en el teatro terminando la copa y mirando el espectáculo de la noche antes de ir a cenar. Muchas plumas y baile.
Mas tarde en el Restaurante Tivoli los camareros visten sus mejores uniformes, la decoración de la mesa y el restaurante está engalanada. Debuta ante la audiencia la camisa de Riga, la corbata y los zapatos de Vilnius. Vemos que la «Gala» como tal carece del «Glamour» que nos imaginábamos previamente, suponemos que en otros barcos los estándares deben de ser mas altos. Recordemos que las travesías del Costa Classica son las más económicas del grupo COSTA CROCIERE y estamos seguros que en otras embarcaciones el «Charming» deslumbrará mas.
A mitad de la Cena reaparece el Capitán con sus oficiales y da una vuelta por las mesas saludando a los pasajeros. Todo muy lindo…pero una duda nos surgió en ese momento.
«¿Quién manejaba el barco?» 😉
Deja un comentario