Ruta en coche: Tenerife de Norte a Sur

¿Qué hacer en Tenerife?

Playa, playa y más playa. Error. Además de la playa, y como vamos descubriendo poco a poco en diversos capítulos de Tenerife a pie, la isla es un mini mundo que ofrece y tiene de todo. Sin exagerar, por ejemplo en invierno, al mismo tiempo que puedes estar en la playa tomando sol puede haber niños haciendo bolas de nieve cerca del Teide. Si nunca antes escuchaste esa palabra te contamos que El Teide es un volcán. Puedes asombrarte ante el paisaje árido y a 20 minutos de distancia respirar aire puro en pleno bosque. Tenerife tiene muchos secretos guardados. El turista o visitante curioso que se proponga conocer un poco más de estás tierras fuera de la zona de arena y sol quedará completamente boquiabierto.

Al menos eso, es lo que nos sucedió cuando realizamos esta ruta en coche en Tenerife de punta a punta. Tanto es así que para no perder detalle la hicimos dos veces en la misma semana. Dejamos las zapatillas de trekking en el placard y esta vez, con las llaves del coche en mano salimos a recorrer la isla.

Estar por encima de las nubes, ver El Teide desde diferentes perspectivas, ver un Tajinaste por primera vez, disfrutar de paisajes volcánicos y el espectacular contraste de colores, respirar aire puro cercanos a uno de los puntos más altos de España, son sólo algunas de las experiencias que puedes vivir en esta ruta.

El recorrido

Salimos desde San Cristóbal de la Laguna, por la ruta TF-24 en dirección al Teide, a pocos kilómetros entramos en el Parque Natural de la Corona Forestal. No te vamos a contar aquí los tipo de árboles que puedes encontrar notese: notofagus canarius, para esa información siempre puedes acceder a expertos en el tema y más información especializada. Lo que si te vamos a contar que transitar por el medio del bosque te generará un ¡WOW! seguro.

En orden de aparición nuestros cuatro miradores preferidos son:

Mirador de Montaña Grande

Mirador de Ortuño

Mirador Cumbres del Norte o Chipeque

Mirador El Valle

Poco antes de llegar a Las Cañadas del Teide cambiamos de ruta, pasamos a la TF-21 a la izquierda, siempre en dirección a ya saben quien.

El protagonista de la ruta: El Teide

Llegamos hasta la base del volcán, tomamos un café con las maravillosas vistas. Nos resistimos a subir ya que prometimos llegar a la cima del Teide sólo cuando terminásemos de dar la vuelta a la isla con #Tenerifeapie.

Para dar un poco de sensacionalismo, El Teide es el único volcán que podría tener una erupción similar al Vesubio, no se si te haces a la idea o te ubicas temporalmente pero se trata de aquél volcán que destruyó Pompeya, hace ya muchísimo tiempo, en el año 79dC. Saliendo de este titular, eso no sucedería de un momento a otro por lo que no hay que preocuparse, además de estar observado por expertos que nos avisarían, un volcán no explota de un segundo a otro sino que siempre otorga señales anteriores como terremotos y temblores.

Siguiendo por la TF-21 a unos 10 kilómetros del teleférico se produce una bifurcación en el camino con dos opciones muy apetecibles para el viajero. Por la misma ruta comienza el descenso hacia las playas del sur: Los Cristianos y Las Américas donde terminar la jornada con una cerveza frente al mar. Pero previo a ese merecido descanso estamos obligados a hacer un Stop en Vilaflor, una pequeña localidad silenciosa y calma, lugar óptimo para conectar con el ámbito rural y caminar lento.

Volviendo a la bifurcación, si tomamos por la derecha la ruta TF-38 nos lleva en dirección a Los Gigantes por un camino donde el asfalto parece colgado en un inmenso baño de chocolate crocante de rocas que alguna vez fueron lava. Conducir por allí pone a prueba las virtudes del piloto y no vale perder la concentración, la caída sobre «el chocolate» podría ser terrible.

Si nunca realizaste esta ruta y tienes pensado visitar Tenerife, ya puedes ir  reservando un día para este itinerario. Si ya hiciste esta ruta, contanos tus rincones favoritos, seguramente hay muchos que dejamos afuera.